Querida lectora, querido lector:
La depresión es la epidemia silenciosa. Ha venido creciendo y con todo lo que causó la pandemia en la humanidad esta enfermedad se ha instalado como la mayor amenaza a la salud mental en todo el mundo.
La depresión no discrimina. Cualquier persona -niños, jóvenes, adultos, ancianos- puede contraerla y sufrirla. Pero, lo más grave, es que si se la padece y no se cuenta con la información necesaria y el tratamiento adecuado, puede agravarse y terminar en tragedia.
Con motivo de la presentación del libro “La ira que llora”, de la psicóloga, terapeuta y radialista Gissela Echeverría Castro, esta edición está dedicada a sondear un territorio que parecía prohibido: la posibilidad de que la depresión pueda sanarse, la certeza de que un acertado y efectivo proceso de sanación cure al paciente y termine para siempre con este mal que azota por años a cientos de miles de personas en el Ecuador y a millones en el planeta.
Este deslumbrante libro, que Gissela también lo lanza para celebrar sus 25 años como directora y productora de radio en las más importantes emisoras del país, marca un antes y un después en el mito de que la depresión no se cura sino que se apacigua con fármacos que, al final, terminan haciendo mucho daño a las personas que los consumen.
Bienvenidos al mundo de la depresión, sus historias, sus terapias y, por fin, su sanación.
Rubén Darío Buitrón
rubendario.buitron@notimercio.ec
Encuentre la edición 84 en todos los puntos de venta de periodicos de Quito, los valles, Riobamba, Ibarra, Ambato, Latacunga y Cuenca.
