Ecuador y Rusia celebran 80 años de amistad entre sus pueblos

RUBÉN DARÍO BUITRÓN/DIRECTOR

Esta semana se festejan ocho décadas de relaciones diplomáticas, políticas y culturales entre dos países que tienen mucho en común. Aquí el testimonio del embajador ruso en Quito, Vladimir Sprinchan.

“Independientemente de dónde trabajan o a qué se dedican, los ecuatorianos que han estudiado en Rusia no se olvidan del tiempo que pasaron en mi país, del tiempo que pudieron conocer todo lo necesario para su trabajo y para su vida. 

No cada uno regresa con una esposa rusa, pero son muchos matrimonios binacionales que mantienen sus mundos, ahora de Rusia y antes de la Unión Soviética.

A través de esas uniones se reconoce que Rusia fue, es y sigue un socio de confianza para Ecuador, un amigo fiel y un aliado sincero, todo a favor de los pueblos y de las economías nacionales.

Vladimir Sprinchan lleva cuatro años como embajador de Rusia en el Ecuador.

Y eso va a seguir para siempre, porque Rusia es un país que elige a sus amigos sin importar la política interna. Hemos tenido excelentes relaciones con los gobiernos de Correa, Moreno, Lasso y ahora Noboa. No hacemos distinciones ideológicas y mantenemos una intensa cooperación con Ecuador. 

Ecuador es un socio muy importante para nosotros. En lo económico, en primer lugar. Por ejemplo, en octubre de 2021, en la presentación de cartas credenciales del actual embajador de Ecuador de Moscú, Juan Fernando Holguín, en el Kremlin, mi presidente Vladimir Putin subrayó que Ecuador es el tercer socio económico comercial para Rusia en toda la América Latina.

Sabemos que Ecuador no es grande desde el punto de vista de su economía, su superficie y su población, pero el volumen de exportación de Ecuador a Rusia es uno de los más grandes. 

En Rusia se aprecia muchísimo la calidad de los bananos ecuatorianos, le belleza de sus flores. Yo suelo comentar a mis amigos en Rusia que ellos compran una rosa ecuatoriana por más o menos de USD 3 o 4, pero acá puedo comprar 25 por solo USD 3. Mis amigos envidian que yo esté tan cerca de sus rosas. El banano ecuatoriano es más conocido y más barato que muchos productos rusos, como la manzana. Y muchas familias rusas prefieren el banano ecuatoriano a las mismas frutas rusas.

Ahora se trabaja para que el banano se transforme en un producto de importancia social porque es necesario para la nutrición de los rusos. Es saludable para la población.

Tengo cuatro nietos que me visitaron y me contaron que en Rusia prefieren comprar bananos ecuatorianos.

Pero, más allá de eso, Ecuador es un país hermoso, un lindo país que tiene cuatro mundos: la amazonía, la sierra, la costa y las islas Galápagos.

No tengo tiempo de viajar mucho, pero conozco Santo Domingo, Ambato, Ibarra, Tena, Morona Santiago… Los ecuatorianos son amables y amistosos y suelen invitarnos a todos los lugares, aunque por mis funciones diplomáticas no puedo asistir a todos.

Rusia siempre está dispuesta a colaborar con Ecuador. Durante la crisis eléctrica pusimos nuestro contingente. No pudimos cubrir todas las necesidades, pero fue una contribución muy importante en tiempo de crisis.

En lo académico, conocemos el interés de Ecuador en ayudar a los jóvenes para formarse como profesionales y no desviarse hacia la violencia. Mi país está listo para ampliar e incrementar la cantidad de las becas en las especialidades que sean necesarias para Ecuador, para la economía, para la medicina, para muchas áreas de producción.

Tenemos otras áreas de acercamiento. Por ejemplo, estamos cerca de presentar un monumento dedicado a dos poetas icónicos de nuestros países: de Ecuador, Medardo Ángel Silva, y de Rusia, Alexander Pushkin. El memorial se construye en el parque al frente de la Casa de la Cultura.

Será un recuerdo imperecedero. Pushkin se quedará aquí en Ecuador como un símbolo de la amistad de nuestros países, que no son solo socios comerciales y económicos sino culturales. 

También quiero mencionar unas cifras: al final de 2024 creció cerca del 2% el intercambio comercial entre Rusia y Ecuador y estamos contentos de que el presidente Noboa se presentó muy abierto y amistoso hacia Rusia, porque conoce Rusia, viajó por su negocio familiar y cuando fue político también. Hoy, con el mercado ruso está interesado en desarrollar varias destinos y direcciones de cooperación bilateral con Rusia. 

El apoyo académico de Rusia es invalorable: Ricardo Hidalgo

Ricardo Hidalgo, rector de UTE: “La relación académica y científica con Rusia es profunda”.

“Desde 2016, la Universidad Tecnológica Equinoccial de Quito (UTE) y Rusia tenemos una relación muy entrañable. Hemos trabajado en 2017 y 2019 con dos nanosatélites enviados al espacio, también con la colaboración de investigadores y científicos ecuatorianos y, sobre todo, con estudiantes nuestros que estuvieron en la Universidad del Suroeste de Rusia.

Tenemos relaciones con un ícono de Rusia, que es la Universidad de la Amistad de los Pueblos, cuna de la cosmonáutica rusa. También tenemos relaciones estrechas con la ex Academia de Ciencias de la Unión Soviética, que ahora es la Academia de Ciencias de Rusia, y hemos trabajado con la Universidad de Kazán, que mantiene el liderazgo en la fabricación de simuladores para el aprendizaje, sobre todo en ciencias de la salud.

He estado varias veces en Rusia, he conocido mucho sobre la cultura, las ciencias, la medicina y la educación superior. Tenemos mucho que aprender, porque ellos rescatan no sólo los aprendizajes tradicionales, sino que insisten mucho en la cultura y en los valores del pueblo. Es un gran aprendizaje.

Otro aprendizaje es la calidez de su gente. Llama la atención lo afectuosos que son los rusos con los latinoamericanos, pero más todavía que ellos saben más de nosotros que nosotros de ellos.

Entonces esta relación entre la universidad y la academia rusa viene de muchos años, es muy fructífera, ha permitido intercambio de docentes e investigadores y también de estudiantes de lado a lado, y ahora estamos preparando el lanzamiento de nuestro tercer nuevo satélite.

A futuro estamos hablando con el embajador sobre la creación de un centro de la cultura rusa en Quito. Pensamos que hace falta una institución universitaria que se dedique a la difusión de esa cultura rusa, pero también al aprendizaje del ruso como segunda lengua, ya que el acceso a la educación superior en universidades rusas para los países latinoamericanos es bastante más fácil que con Europa y EE.UU».